Jueves 26 de julio de 2012
Datos
numéricos del GPS (aproximados):
Distancia: 14 Km
Desnivel acumulado: +750 m / -700 m
Tiempo marcha: 4 horas
Tiempo total: 7 horas y media
Quinto
dia de trekking y el cansancio se empieza a acumular. El despertador suena,
pero no lo escuchamos y seguimos durmiendo. Es bastante probable que haya
habido fuerte movimiento en la habitación, ya que cuando de repente nos
despertamos a las siete y media, allí casi no quedan ni las camas. Nos
preparamos rápido, subimos a desayunar y con tanta prisa, para las 8.15 estamos
listos, fuera del refugio.
Glaciar Pre-de-Bar y Mont Dolent
Hoy
toca cruzar de nuevo la frontera. Esta vez dejamos Italia, para entrar en Suiza
por el cantón del Valais, así que volveremos al “Bonjour”.
Tenemos
una etapa sencilla y tranquila, así que sin prisa empezamos la subida hacia el
Grand Col du Ferret (2.537 m) por las zetas que vemos detrás del refugio (2.061
m). Apenas 500 m de desnivel que superar y que a simple vista se presentan
bastante cómodos.
Val Ferret
Primero
las zetas y después el camino se vuelve mas tendido. En todo momento tenemos la
Val Ferret (por donde remontamos ayer) a nuestros pies y el glaciar Pre-de-Bar
y el Mont Dolent de frente. El día esta totalmente despejado, el sol promete
calentar y no corre nada de viento. Se sube muy bien y disfrutando con las
vistas, por laderas herbosas llenas de flores que no paro de fotografiar. A
medida que ganamos altura la visión del glaciar es todavía más impresionante.
Glaciar Pre-de-Bar y el refugio Elena abajo
Por ahí voy...
y por ahí suben Dani y Rafa que caminan por delante
Glaciar Pre-de-Bar y Mont Dolent
Seguimos subiendo
Otra mirada hacia la Val Ferret
Bonitas vistas desde la subida
Se aparece el Grand Col de Ferret
Un poco de zoom... queda claro donde es el collado no?
Sobre
las 9.30 llegamos al collado. Suerte que es amplio, porque esta lleno de gente!
Se aparece Suiza ante nosotros y tratamos de distinguir algún pico, aunque la tabla de orientación no nos sirve
de mucha ayuda.
Últimos metros hacia el collado
Suiza desde el collado
Como
estamos frescos todavía, echamos una última mirada a Italia y decidimos seguir
camino. Ahora toca bajar y el camino sigue siendo más que cómodo. Seguimos
rodeados de verde salpicado de flores de todos lo colores. En menos de una hora
alcanzamos La Peule (2.100 m), una antigua granja transformada en refugio. Apenas
nos debe de quedar otra hora hasta Ferret donde cogeremos el autobús hasta
Champex-Lac, así que decidimos parar aquí a descansar.
Cardinal: cerveza muuuy aconsejable. Todo un descubrimiento!
Hacia
las 11.30 nos ponemos de nuevo en marcha hacia Ferret (1.700 m); seguimos bajando
por camino bien marcado, que pronto se hace pista y después asfalto. En media
hora alcanzamos el pueblo y como tenemos algo más de una hora de espera para el
autobús, nos acercamos hasta la terraza del bar. El autobús se puede coger en cualquiera
de los pueblos por los que pasa el Tour del Mont Blanc; o se puede hacer
caminando, pero es una buena kilometrada y tal vez conviene dividir la etapa.
La Peule
Llegando a Ferret
Las primeras
molestias que ha tenido Rafa en la rodilla se empiezan a volver mas serias y
nos dice que ha notado bastantes pinchazos sobre todo en la subida al collado.
La verdad es que hay subidas duras, pero unas bajadas muy fuertes, que ponen a
prueba las rodillas de cualquiera. Hay que tenerlo en cuenta a la hora de
planificar el Tour y llevar unos palos es bastante aconsejable.
Llega
la hora del autobús. En principio este va hasta Orsières y allí tenemos que
cambiar; pero al montarnos (aceptan euros) el chofer nos dice que parara en Orsières
pero que luego sigue hasta Champex-Lac, así que no es necesario hacer el
cambio. Por cierto, en la página web pone una tarifa, pero el chofer tiene una
pantalla en la que pulsa “TMB” y como por arte de magia, el precio del billete
sube. Interesante. No lo recuerdo con exactitud, pero me suena que fueron 12
francos suizos por cabeza.
Aprovecho
el viaje para cerrar un rato los ojos y echar una “cabezadita”. Entre una cosa
y otra, son casi las tres de la tarde cuando llegamos a Champex-Lac (1.420 m). Es un
pueblo, por lo visto lugar de veraneo que muchos suizos, al borde de un lago. Todo
muy cuidado, muy limpio, muy… suizo. Comemos junto al lago, donde otros compañeros
del Tour aprovechan para darse un baño. No hacemos una parada muy larga, ya que
hasta el refugio apenas nos quedan 45 min y preferimos llegar cuanto antes y así
descansar allí tranquilamente.
Champex-Lac
Al
final del pueblo encontramos señales que indican el camino hacia la Relais d’Arpette;
cruzamos bajo el teleférico de la Breya y nos internamos en un bosque por el
que haremos toda la subida al lado de un torrente. Es una gozada este camino; y
ahora que hace calor y el sol pega fuerte, se agradece enormemente caminar por
el bosque.
Subiendo por el bosque hacia el refugio
Pasadas
las cuatro de la tarde llegamos al refugio (1.630 m). Estamos todavía en la
puerta cuando escuchamos: “A ver, chicos, una sonrisa!!”. Como no, Gontzal, que
viene desde Elena, caminando hasta el último metro.
Relais d'Arpette
Nos
cuenta que el camino esta en general bastante bien, pero que es una kilometrada
importante. Llega bastante cansado y al dia siguiente esto le pasara factura.
Por lo visto, la subida a Champex-Lac es la peor parte del camino, sin ningún interés.
En general, llegamos a la conclusión de que teniendo tiempo, puede ser
interesante alargar el Tour y dividir esta etapa y si no, tomar el autobús en
alguno de los pueblos del camino. Teniendo en cuenta que al dia siguiente nos
viene la etapa reina, no conviene cargar hoy demasiado.
Pasamos
la tarde al sol, disfrutando del buen tiempo, de la tranquilidad que se respira
en el ambiente y concienciándonos para lo que nos espera mañana: la Fenetre d’Arpette.
Las previsiones son de mucho calor, pero buen tiempo así que sin duda iremos
por allí. Rafa y Yaiza que se ven un poco tocados con las rodillas y al tener
un plan muy ajustado de tiempos, deciden que irán por la Bovina.
La Relais
d’Arpette no es un refugio, es un hotel; aunque funciona similar a un refugio.
El precio es excesivo, pero es que estamos en Suiza. Eso si, los baños están muy
limpios, tenemos una habitación para las cuatro,… al menos, algunas “comodidades”
a cambio.
Para
cenar, la famosa (y esperada) fondue, que no decepciona y esta tan buena como habíamos
escuchado. Y para el que no le guste la fondue, hay otro menú, a elegir.
Con
las energías repuestas con la cena y con la etapa de mañana en la cabeza, nos
vamos a dormir cuando empieza a echarse la noche en la Val d’Arpette.
Atardece en la Val d'Arpette (la Fenetre no se ve desde aquí)
Muy bonito.... Qué recuerdos... He dicho ya que me encantan las fotos?? Me encantan las fotos!!!
ResponderEliminarEl menú alternativo a la fondue estaba muy bueno, sopa de verduras y cerdo guisado con puré de patatas, aunque fuimos bastante minoritarios. Se agradece que ofrezcan el otro menú.
ResponderEliminarDani! Gracias por compartir la info... me centre tanto en la fondue, que no recordaba cual era la otra opcion!
Eliminar